Tanto ofrezcas tanto vales


El día que tengamos claro que nosotros los trabajadores no dependemos de los dueños de los comercios o fabricas. Ellos no nos dan de comer, sino que nosotros, si les damos de sus caprichos pues eso es lo que son caprichosos o abaros. que triste ver al peón miedoso acachar la cabeza mientras le amenazan, que penoso el trabajador que relata a su patrón los chismes de sus compañeros sintiéndose mas importante por ello y luego es al primero que le dan la patada. ¡¡Joder!! como me duele la espalda rota por un puñado de euros y aun asi no puedo acceder a una vivienda. Y me reviento a currar. ¿Que acaso soy tonto? ¿Que no sera que este mundo de hoy no esta hecho para los currantes? ¿Que el ideal a seguir no sera el Matamoros? Che esto, es deprimente donde esta la clase obrera ¿Dividida? nuestros abuelos si que supieron lo que era la esclavitud del capital. y lo intentaron todos unidos cambiar las condiciones, aunque perecieron en el intento. A ellos a toda esa gente buena, amable y trabajadora pagaron con sangre y nuestros padres con luto, y esos son los colores de nuestra bandera Sangre y Luto. Pero la patronal ya no se acuerda del obrero armado, piensa que eso ya paso y empieza otra vez a fanfarronear con su cochazo de aquí para allá, con su despotismo. Y lo que no piensa que su hijo puede ser el Campesino y yo Durruti o Cipriano pues la guerra de clases siempre se repite hasta que un día venceremos la buena gente. Y andaremos sin dinero en los bolsillos porque no nos hará falta. Y no por coleccionarlos, esos miserables.